domingo, diciembre 17, 2006

pretender

¿Y qué falta?, ¿qué es lo que sobra a parte de mi? ¿Cómo formar corazas para protegerme? Tan vacío, tan desnudo, tan inconsistente caigo, nuevamente caigo. La ansiedad es cascada, mis represas no pueden más. Los lobos en la puerta esperan para devorarme; atacarán coordinados, sigilosos, y no querré percatarme de su presencia, no me defenderé. Aislaré mis socorros, clavaré mis gritos en mi propia piel. Ahogaré mis impulsos en tinta roja, mis sentimientos promiscuos apagados en el candor de la pelea. Me esparciré en los vientres impropios, elevaré mis pies para colgarme al revés, sumido en la humillación displicente de mi fragilidad.

Te reconozco conciente, y esta lucidez es mi enfermedad.

No, no hay sorpresas cuando la marea sube, cuando las frases se estampan en el agua, y la sal se pega a la piel. No, no hay esperanzas cuando la música termina, cuando el silencio llega a los oídos y estos se hacen más presentes que antes. No, no hay esperanzas, nunca existieron, ni siquiera tuve las agallas para pensar en ellas. No, no hay nada más, sólo distancia, sólo espacio insuperable, sólo un abismo tácito, implícito, sólo incomodidad funeraria.

Pero qué más puedo hacer, sino sumirme en pastos de rugosa afonía. Suspendiendo mi cabeza desde el segundo piso, esperando que todo termine; suspendiendo mis actos bajo agua, anhelando que todo acabe en la humedad; suspendiendo mi tristeza a largo de los días, fingiendo que la puedo evitar.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me gustó que enchularás el blog fijaté. El código de barrra, esta pulento :p. en todo caso, lo que importa es el contenido, y eso siempre ha estado más que bien.
Gisel

Anónimo dijo...

Corazón coraza


Porque te tengo y no
porque te pienso
porque la noche está de ojos abiertos
porque la noche pasa y digo amor
porque has venido a recoger tu imagen
y eres mejor que todas tus imágenes
porque eres linda desde el pie hasta el alma
porque eres buena desde el alma a mí
porque te escondes dulce en el orgullo
pequeña y dulce
corazón coraza